En una orilla hay árboles,
árboles y frutos, inmensos bosques
que pueblan la ladera
hasta el monte.
Y las semillas que derraman esos árboles,
semillas diferentes
para cada espacio de tierra diferente.
Y en la orilla hay caminos. Caminos
que surcan los bosques.
Y hay reinos también;
reinos en la orilla.
Reinos que no rebasan las aguas,
que no pueden.
En la otra orilla está el hombre… y el
hombre
necesita árboles donde cobijarse,
aguas donde nadar.
Y también la semilla,
que es la edad primera en donde
el silencio desaparece
y se abre… la semilla
que es aliento.
Y necesita montes que escalar,
muros que construir, espacios
donde habitar.
Pero tal vez no lo entienda.
2003