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Debe ser la amistad
quien me hace hablar tanto muchas veces.
Te conocí ayer… y ya me parece conocerte
de antes;
debe ser ella ese manantial que llega hasta mi alma.
Quiero hacerte parte mía…
y que sea el alma el motivo de nuestro amor.
-1985-
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El amor sin motivo también tiene alma y a veces necesitamos desmotivarnos para encontrar la nuestra. La amistad es como un banco de peces en el mar (una maravilla danzando al unísono con un mismo propósito).
ResponderEliminarSi nos alejamos del amor podemos verlo más diáfano, pero también más oscuro si en ello perdemos nuestra identidad. Pero si nos alejamos es que no lo era, pasa la amistad de infinitos seres danzando a encarnarse en uno sólo. Pero también es un tesoro que se debe buscar muy despacio, que debe modelarse cada día
ResponderEliminarHay un tipo de amor desprendido, incapaz de esclavizar al objeto amado. Si nos alejamos es que queremos conservarlo tal y como era.
ResponderEliminarSi nos alejamos de él nos exponemos a que un temporal nos lo arrebate. El mundo nos ha colmado de un materialismo que nos impide llegar a ese desprendimiento. Existe, claro que sí, un amor desprendido, pero por lo general la persona que ama busca en el amor lo que le falta a él.
ResponderEliminarNuestra mente nos engaña dibujándonos un amor idílico... o no es una amor idílico sino un amor pleno; sólo la fuerza de nuestro ser nos hace ver ese reino en nuestro interior. Es entonces, cuando nos despertamos, cuando sentimos la fragilidad de nuestros lazos
Lazos frágiles e indecisos abren la caja de música del amor, pero el mundo nos engaña con su materialismo.
ResponderEliminarCasi siempre el amor va en contra de los caminos que nos señala la humanidad, porque el amor se eleva sobre ellos. El lazo es tan frágil que no señala donde acaba la amistad y empieza el amor, tal vez la amistad nunca se acabe, tal vez el amor no sea más que el vestido de una tienda de saldos, no sé si es para toda la vida o no... pero lo que sí es cierto es que nos atrae a un mismo centro, a un mismo interior, aunque después el tiempo borre las huellas que ha dejado. Nos engaañamos, el amor sigue estando ahí porque es un lAZO INVISIBLE
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