
Sin querer, sucede que uno se pierde en la oscuridad,
se desvanece dormido en las brumas,
y una tristeza tan densa como la niebla
desvanece las palabras, y solo quedan sus ecos, sus recuerdos.
Y nada se puede hacer salvo irse,
irse abrazándose al aire
a una esperanza donde salar las heridas,
en silencio,
un silencio al que tímidamente se acerquen las palabras,
y todo vuelve a empezar,
momento único, justo, determinado.
del sueño de lo posible
También en la oscuridad se escuchan las palabras aunque no sean pronunciadas, son las que surgen del corazón y se abrazan a la vida.
ResponderEliminarPrecioso y lánguido poema. No pierdas nunca los sueños.
Un beso grande.
Precioso y sentido poema. Acaricia el alma.
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