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Con estas palabras os doy la bienvenida y mi mayor agradecimiento a vosotros que sois los que hacéis posible que este blog se mantenga activo y vaya renovándolo cada poco tiempo. Mi deseo es que el contenido de este blog os aporte diferentes emociones y sentimientos. Un abrazo cariñoso también a todos los que estáis ahí y formáis parte de esta poesía y a todos los que quieren también formar parte de ella, a las nuevas incorporaciones: un abrazo de bienvenida a todos ellos



jueves, 20 de noviembre de 2014

El amor

   

    El amor.

 Qué labor maravillosa
es hacer la vida hermosa
a toda persona ajena,
demostrarle tu honradez!.

 Ella se sentirá prendada
y verá lo equivocada
que estaba cuando sentía
demasiada timidez.

 Toda la vida pasada
la verá más allanada,
sentirá que la vida es bella
si se mira con sencillez.

 Comprenderá en ese instante
que la vida no es tan mala,
es bonita y es alegre
si se vive con amor.


              - 1978 -


6 comentarios:

  1. ¿Nos estás maltratando con algún tipo de perversión que desconocemos?

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  2. No, Raúl. Tengo encima de la mesa una serie de poemas que expresan soledad y quisiera darles un orden y un motivo. Me pareció bien la sociedad Jean-Fausto (o Fausto-Jean) porque los dos estamos compartiendo un mismo camino. Pero sobre todo eso, darles un orden

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  3. La perversión está en la dulzura (deberías dejar el azúcar de las mañanas y las pastas del mediodía). Espero que Fausto haga oficio de su nombre porque estoy deseando un verdadero maltrato.

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  4. Ya te entiendo, pero el maltrato está en el vacío, en la necesidad de buscar una definición, en el no entender. Sabes que Fausto nunca supo escribir con lágrimas en los ojos, pero te irá desvelando lo que siente y tal vez le comprendamos

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  5. Las lágrimas de los ojos emborronan la tinta. El entendimiento es un burro de noria y cierto maltrato empuja de nuestra testarudez hacia nuestra necesidad.

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  6. Yo no defiendo a Fausto, pero le respeto, nadie habla de algo "porque sí". Pueden cambiarse las formas, los discursos... pero nunca el fondo. Es cierto que a veces el maltrato puede ser síntoma de debilidad, pero al igual que cuando una persona dice "ay" intuimos que le duele algo, así nuestra mirada. Yo siempre defenderé a quien se encuentra en apuros

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