Tenía ganas de habérselo dicho a Carola, lo
que me pasó con Jovanna (no es así, pero me entiendo). Estuve hablando con
ella, ya no quiero recordar que el padre está enfadado, tal vez le molesta que
acompañe a Loli, me dijo Carola que a ella no le molestaba. Creo que discutieron.
No me lo merezco. Sólo le dije a Carola que había un bicho en mí que me movía a
ser lo contrario. Que no soy como me veía ella. Que hablase conmigo, me
ayudaría. Le va a costar entender lo que fue de su hermana: a mí me va a costar
demasiado, pero fue ella la culpable. Fue quien se echó sobre mí. No sé si
pensé, fui inconsciente. Ya lo era cuando pensaba llegar este momento.
Perdóname, Loli: te traicioné. No sé si lo
sabrás. Algún día. No quiero que pienses mal de mí cuando lo sepas. En este momento
no me importa nada. Ignoro cuándo te lo diré. ¡Ayúdame!. Me agrada verte
sonreír a mi lado, conmigo, quisiera agradecértelo más sinceramente. Si
supiesen cómo soy. Hoy no irás a Ramallosa. Mejor, no sabría sonreír contigo:
sería un fingimiento. Soy como un niño. Me gustaría no haberlo hecho, que nunca
llegase el día en que se destroce tu ilusión.
Si, pero ya todo es tarde. Mi inconsciencia
me impide hablarte sinceramente. Puede ser ella ese bichito, no lo sé. Creo que
a partir de ahora no sentiré la alegría de la misma forma. No me digas nada,
sólo mírame. Tengo que seguir.
No me digas nada,
sólo mírame. Tengo que seguir
conviviendo
con el pasado… tan contrario
a mi forma de ser.
Me siento infiel tantas veces que no
merezco,
que no puedo. Dime que todo esto pasará.
Y no me digas nada más, sólo déjame
seguir contando contigo.
Hoy me faltó la luna
que siempre está a mi lado: se quedó
dormida y yo
no he sabido
velar sus sueños.
Ya sé que no soy nada para Loli, pero tampoco
querría dañarle o lastimar este instante tan feliz. Carola dijo que era
mentira… no, no lo puede ser. Me gustaría decírselo, podría en el baile, pero
allí sólo quiero estar feliz. Cuando ella lo sepa, habré perdido algo mayor que
lo de Vigo a cualquier alegría. No quisiera pensar en eso, pero ya ves.
No sé, cuando llego al taller por que a José
la habían quitado una muela. Cuando le
dije esta mañana a Teresa: “Allí me consideran guapo…”, me respondió: “Yo siempre
te lo llamé”… aunque añadí: “La historia de toda una vida”: me había quedado
con la boca abierta. Bueno, voy a escribir.
Todo
este aire
de encanto me da fuerzas
para enfrentarme de nuevo
a ese futuro incierto, a esa imaginación
mía
que siempre teme lo peor.
Llegará la hora y ese miedo
se verá desbordado, alcanzado e incluso
superado
por esta magnitud celeste
que me abraza cada vez que le recuerdo,
pasan estrellas hermosas
y siento algo de ti
en cada una.
El aire luego
transformará más palabras
en vigor… y será la fuerza
que yo le ponga.
Destacar los versos es una forma de acrecentar el jugo??? Me gusta el "vigor" del último poema...
ResponderEliminarJean quiere hacer poesía de lo que siente y de lo que ve. ¿Acrecentar el jugo o hacerlo más consciente?, porque a veces el sentimiento sólo es consciente cuando le das un cuerpo y lo modelas
ResponderEliminarAcrecentar el jugo es bebernos el licor de una poesía exprimida hasta la pulpa de la conciencia. Solemos recrear cuerpos para la indecencia, la inconsciencia, la indolencia, la insolencia, la inocencia y algunos momentos jugosos...
ResponderEliminarHasta la última palabra... eso siempre te gustó. La poesía que hurga en lo más íntimo hasta arrastrarnos con ella: no me parece ilógico. Recreamos cuerpos para interpretar en ellos los símbolos que la realidad nos muestra, pero eso nos conduce a otra investigación: la de nosotros mismos; la realidad es reflejo de cómo nos vemos por dentro Según como veamos la realidad, así será nuestra emoción ante ella
ResponderEliminarSi no te contesté antes fue que durante días no podía disponer del ordenador, pero ahora ya está bien
Si tienes algún problema con esos "trastos convalecientes" sabes que estoy encantado de echarte una mano. ¿Nosotros mismos? Siempre tenemos una idea parcial de lo que somos, y nunca una idea contrastada de cómo nos perciben.
ResponderEliminarYa me la estás echando, aunque nos sintamos sólo a través de esta pantalla: estás ahí. Idea parcial de lo que somos porque nuestra mente nos hace pasar por alto lo que no interesa, generalmente lo que casi siempre nos define: nunca hallaremos la completa verdad de lo que vemos, pero seguro que cada día conseguiremos desentrañar detalles del interior.
ResponderEliminar