Desde la ventana sus ojos otean el paisaje
y se pregunta qué ha sido de su tiempo.
Ya no hay fuerza en sus manos
y se siente solo...
"En lugar de una esencia busqué
la soledad más perpetua que mis manos tocaban.
Y el camino se hizo muy duro
y el tributo se hizo muy frágil".
Asomado a su ventana su rostro se marchita
y se pregunta qué fue de su inocencia...
y de su rostro y de sus lágrimas.
"En lugar de una esencia busqué
el espacio en donde el nido se transformaba en agua
y en cosmos.
Y la serpiente se hizo diadema
y el silencio se hizo batalla".
Su juventud fue breve y tardía,
como apurándose, como queriendo,
gozando a medias la vida.
Mañana... tal vez mañana- decía.
Ahora lo sabe todo, y lo siente, y lo ve...
"Entonces busqué la ausencia
en lugar de un olvido,
la ausencia en donde el cóndor se transformaba en golondrina
y en tiempo".
Desde la ventana su vista se apaga
y brotan los recuerdos de ayer.
Y se duerme,
cansado,
entre sus viejos y pesados brazos.
2007