Te hice diferente…
para que nadie supiera
que habías nacido de polen y agua
en las cepas cristalinas
de las vides en flor.
Te hice verso
para que nadie pudiese corromper tu imagen
ni vulnerar tu lecho…
inmóvil y frágil.
Te hice romo…
para que nadie pudiese conocer tu origen,
tu blanca morada.
Y te escribí luego… muy despacio,
bajo las sábanas que dibujaba el firmamento
sobre mí…
con forma de mujer.
2004