No veo tu cuerpo,
nunca lo vi,
ni oigo tu voz… pero hoy
te siento más cerca
que nunca.
No veo tu imagen,
apenas puedo imaginarte ante mí
con esos vestidos que te han ido cubriendo
los años
a medida que pasabas…
y sin embargo te siento
porque sentir y amar me basta
para estar vivo.
Nadie puede cubrirte,
nadie puede amarte,
nadie puede notar
tu mirada de luna, pero yo he aprendido a
retenerte…
cuando me siento en paz.
1982
No hay comentarios:
Publicar un comentario