Están agolpando
nuestros libros
teñidos de textos y de lujurias;
de ahí el ruido que hay en la calle,
pues los recogen al pasar.
Ya se dispusieron los andamios
en donde han de fusilar a los libros…
y en el suelo quedará el manantial
que recogerá
la sangre de unas palabras proscritas:
el fusilamiento de la cultura.
-2016-
¡Cuántas veces fusilada a vuelto de los paredones!
ResponderEliminarParedones de palabras cual grafitis de la gente culta
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